Quizás no crees que nuestros animales de compañía sean tan importantes para tu bienestar físico y mental. Cuidarlos como es nuestra obligación y recibir su afecto, además de pasar un buen rato jugando y paseando a su lado, siempre es beneficioso y nos hace sentir mejor.
Sin embargo, ¿eres consciente de la capacidad de los animales para mejorar nuestra salud? Te dijimos cómo afecta su presencia en nuestras vidas, lo que nos da otro motivo para tratarlos como parte de la familia y atenderlos como se merecen.
Quizás es cuestión de hormonas.
Las hormonas son una de las principales razones por las que el estar con nuestros animales domésticos nos hace sentir tan bien. En términos de química, los estudios han demostrado que acariciar un animal de compañía libera oxitocina. Esta hormona también se conoce como la «hormona del amor». Además de calmar, reducir la ansiedad y el estrés.
La dopamina y la serotonina, ambas hormonas relacionadas con el bienestar, también se liberan cuando estás a gusto con tu mascota. En consecuencia, aquellos que las cuidan, juegan con ellas y comparten momentos positivos mantienen un estado de ánimo más positivo, presentan niveles más bajos de cortisol, una presión arterial más alta y tienen una probabilidad más baja de padecer depresión que aquellos que no las tienen . Mirar a los peces nadar en un acuario incluso puede aliviar tu ansiedad y relajarte.
«hormona de la pasión». Además de calmar, reducir la ansiedad y el estrés.
Mejora la responsabilidad y la autoestima
Los seres humanos que se relacionan con animales de forma regular, con afecto y cuidado, experimentan un aumento en su autoestima. Además, adquieren la habilidad de controlar sus impulsos. Contar con un animal de compañía en la familia también implica aprender responsabilidades, establecer una rutina y adoptar buenos hábitos. Depresión de aquellos que carecen de ellas. Mirar a los peces nadar en un acuario incluso puede aliviar tu ansiedad y relajarte. «hormona de la pasión». Además de calmar, reducir la ansiedad y el estrés.
Esto es especialmente importante para los niños, a los que también debemos enseñar a no agobiar a la mascota que haya en el hogar o en la casa a la que vayan a visitar, y a respetar los momentos en los que la mascota no quiera jugar, Prefiera descansar o estar sola. Por lo tanto, los más pequeños también aprenden respeto y empatía al interactuar con los demás, que carecen de ellas. Mirar a los peces nadar en un acuario incluso puede aliviar tu ansiedad y relajarte. «hormona de la pasión». Además de calmar, reducir la ansiedad y el estrés.
Sin embargo, es importante enseñarles desde el principio que una mascota no es un juguete, sino un ser vivo que experimenta emociones y sufre como ellos, y que es su responsabilidad cuidarla. Como resultado, podrán aprovechar las ventajas de tener un animal de compañía, aprender buenos hábitos y sentir empatía con los demás.
Incrementan la sociabilidad y la actividad de las personas.
Cuidar a nuestros compañeros también beneficia nuestra salud física, especialmente la cardiovascular, ya que nos obliga a mantenernos activos y brindarles atención. Sin duda, salir a pasear al perro varias veces al día aumentará tu actividad física y, por mucha pereza que sientas algún día, tu necesidad te obligará a mantener este hábito saludable.
Los animales de compañía, por otro lado, ayudan a evitar el aislamiento social. De hecho, mejorar las habilidades sociales es fácil si tiene una mascota. Al salir a pasear, es probable que hables con otros propietarios de animales y perros, y que los niños se acerquen.
Por todas estas consideraciones pon una mascota en tu vida pues mejorará todo su entorno incluso más de lo que esperas.
Revisado por: José Luis Vaquero
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